Os dejo este regalo que me hizo Anxo hace dos días. Volvió para saludar y dejarme estas letras en las que hay mucho de mi y parte de lo que he escrito en los últimos años. La idea de este texto parte de la canción que da título a la entrada y que yo un día compartí. Es un precioso detalle y debía compartirlo aquí (previo permiso). Gracias por leer entrelíneas. GRACIAS.
Hey, Tina, ¿qué estás escuchando? Hoy no es San Valentín, hoy no suena Tonino, pero no descarto que lo haga Bambino. Grandísima señal sería esa.
O quizá suena Leonard, porque sigues esperando, como él, por algo que quizás no exista.
Hey, Tina, dime, dinos, ¿qué estás escuchando? ¿A que ventana te asomas hoy? ¿Ves a la chica de ayer? Hoy es víspera de fiesta, seguro que es Louie mientras Iggy te habla de ese marinero.
Si fuera verano, estarías viajando con las ventanillas bajadas mientras el Jefe se desgañita con su Hungry Heart. Claro, que se entere todo Cádiz que Tina volvió y que su lema es "¿Qué cojones importa más que ser feliz y vivir?"
Hey, Tina, ¿qué estás escuchando? Quizá suena Wilco, dándote la razón, que no es necesario poner nombres, que no es necesario definir, y que lo importante es que te lleva y te dejas llevar.
O quizá Antonio te está hablando, y necesitas regalarnos otra maravilla de relato, de esas que hablan de lo que tú y yo sabemos.
Hey, Tina, ¿qué estás escuchando? ¿Hay boquerones? Mejor acompañarlos con una ración de Burning, o de Rosendo, o de Quique González, dependiendo de la compañía, y si nadie levantó ningún muro.
Hey, Tina tú lo dijiste: "Una de las cosas que me parecen más difíciles en cualquier tipo de relación es decir adiós", por eso siempre digo ciao, para despistar. Y también dijiste "el camino siempre está ahí cada cual que vea cómo hace el suyo...",
Sí, cada cual que vea cómo hace el suyo. Y es un lujo para todos nosotros que le pongas letra y música a nuestros caminos, mientras tú haces el tuyo.
Hey, Tina, ¿Qué estás escuchando?
Déjame adivinarlo. Déjame verte la cara, no ocultas nada, lo que eres se ve, lo que sientes suena y llega a nuestros ojos y a nuestros oídos. Y a nuestro corazón.
