Paralelismos como espejos
Espejos en los que ya no quiero mirarme.
Vidas, historias que no quiero volver a vivir.
la lluvia renovando esta sombría tarde.
En mi mano, un vaso,
vacío, dos hielos,
el juego perturbador bajo mis labios
y aquella fatídica y vieja sensación…
La pérdida,
preguntarse cuál es el error.
Sales como el Sol de este atardecer,
tu calor me quema la piel,
te veo, estás aquí
y la sensación se desvanece al fin.
Y tú, lo sé, volverás…
siempre llegas cuando nadie te llama
pero ya no te creo.
¡Bang!
El ruido de un disparo.
¡Jódete, incertidumbre!
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